El torero madrileño Jesús García anunciaba a través de sus redes sociales la decisión de dejar de torear. ‘Me toca dar un paso difícil, pero lleno de verdad: despedirme del mundo del toro’, comienza el comunicado.
‘Me retiro, sí, pero no me voy de vacío. Me llevo todo lo vivido, cada lección y cada sueño cumplido’, asegura Jesús García. El novillero se forjó en la Escuela de Juli, destacando por sus formas desde sus inicios. ‘Empecé siendo apenas un niño, con sólo 10 años, en la Escuela Taurina, lleno de sueños y con esa ilusión que solo se tiene a esa edad. A los 14 años inicié mi carrera y desde entonces, el toro ha sido mi vida, mi pasión, mi motor’.
‘Cierro este capítulo con el corazón lleno de gratitud: a mis maestros, a mi familia, a mis amigos, a los compañeros de camino y, por encima de todo, a la afición, que siempre supo darme su respeto y su cariño’, asegura el novillero. ‘He sentido el miedo, la entrega, la gloria y también el dolor, pero, sobre todo, he sentido la felicidad de dedicarme a lo que siempre amé’.
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