sábado, 9 de noviembre de 2024

Muere Conrado Abad El eterno maletilla a los 98 años de edad en Salamanca

Triste noticia para la afición de Salamanca y más la de Ciudad Rodrigo, Conrado Abad, ha muerto hoy sábado a los 98 años de edad.  El popular maletilla. El eterno símbolo de las capeas. El torero humilde que encontró en la tauromaquia de los pueblos, en las capeas y al amparo del toro bravo su filosofía y la ilusión de su vida. El pasado viernes, cuatro días después de cumplir 98 años (28 de octubre), tuvo que ser ingresado de urgencia en el hospital Universitario de Salamanca en estado «muy grave» a causa de una infección respiratoria, derivada del coronavirus que había sufrido unos días antes, que supuso una mayor gravedad dada su delicada salud y avanzada edad. Pasó unos momentos muy delicados pero, para sorpresa de todos, en los últimos días experimento una franca mejoría, por lo que este viernes fue dado de alta del centro hospitalario de la capital charra para volver de nuevo a la residencia mixta de Ciudad Rodrigo, donde vivía desde los últimos cuatro años. Allí internó en plena pandemia, después de sufrir su último grave percance, una rotura de cadera tras una inoportuna caída que le obligó a entrar en este centro asistencial. Aquella ocasión, en 2020, y por aquel motivo, fue la última vez que Conrado había estado ingresado en el hospital. Antes de este último ingreso, y de la rotura de la cadera (2000), en el mes de agosto se cumplieron 16 años del último percance que sufrió Conrado delante de un toro, en agosto de 2008, en las fiestas de Torrejoncillo (Cáceres), cuando tenía 82 años de edad. Aquello supuso su retirada definitiva de las capeas, donde ha sido el maletilla más ilustre, popular y conocido. La eterna figura de esta fiesta. La última vez que toreó en público, ya no un toro sino una becerra, fue en 2011, en un homenaje que se le tributó en Ciudad Rodrigo. Precisamente, en Miróbriga recibió otro homenaje el 17 de julio de 2021 a modo de festival taurino. Aquel día hizo su último paseíllo, ya apoyado en un andador. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario